La tensión entre el presidente Donald Trump y el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, ha sido una fuente constante de incertidumbre para los mercados. Sin embargo, el reciente giro en el discurso presidencial ha generado un alivio inesperado: Trump asegura que no tiene intención de despedir a Powell, pese a sus ataques previos.
La reacción de los mercados no se hizo esperar. El dólar se fortaleció y el precio del oro retrocedió, rompiendo con su tendencia alcista de las últimas semanas. Esta dinámica resalta cómo las palabras del presidente, incluso sin cambios concretos en política monetaria, pueden modificar el apetito de los inversores por activos considerados de refugio.
En este artículo de InvertProfit, exploramos cómo esta relación personal está impactando a los mercados globales y lo que puede significar para tu estrategia financiera en un entorno donde la política y la economía están más entrelazadas que nunca.
El mercado respira: Trump enfría la amenaza sobre Powell
Después de semanas de insultos públicos, presión política y rumores sobre un posible despido, Trump dio marcha atrás:
«No tengo intención alguna de despedirlo. Nunca la tuve.»
Así respondió a los medios desde la Oficina Oval, desmintiendo su retórica anterior, donde incluso lo llamó “gran perdedor”.
La importancia de esta declaración no radica sólo en la política institucional. Lo crucial es cómo reaccionaron los mercados:
- Los futuros del S&P 500 y el Nasdaq subieron inmediatamente después del anuncio.
- El dólar se fortaleció, al disiparse el temor a una interferencia directa con la Reserva Federal.
- Y en consecuencia, el oro cayó, rompiendo su racha alcista, ya que los inversionistas migraron nuevamente hacia el billete verde.
Este cambio de tono llegó justo después de días de especulación, impulsada por declaraciones previas en las que el propio Trump insinuó un posible despido del titular de la Fed 🡥.
¿Por qué el oro cayó tras la calma entre Trump y la Fed?
La relación entre el oro y el dólar es inversa: cuando uno sube, el otro tiende a bajar.
Durante semanas, la presión política de Trump sobre la Fed alimentó el temor a un debilitamiento de la moneda, lo que empujó al oro a niveles récord. Pero con la promesa de estabilidad institucional, ese miedo retrocedió.
El oro perdió atractivo como refugio, porque el mercado ya no anticipa una guerra abierta entre la Casa Blanca y el banco central. En otras palabras:
- Menos tensión = más confianza en el dólar
- Más confianza en el dólar = menos necesidad de refugiarse en el oro
Este cambio ha sido especialmente notorio tras el repunte histórico que analizamos en nuestro artículo sobre el nuevo récord del oro en 2025, impulsado inicialmente por la desconfianza hacia los activos estadounidenses.
Powell se queda… pero la presión continúa
Aunque Trump dio marcha atrás en su amenaza, su mensaje fue claro: quiere que la Fed actúe ya.
“Este es el momento perfecto para bajar tasas de interés”, declaró.
Sin embargo, Powell ha mantenido su postura independiente, recordando que el mandato de la Fed no responde a presiones políticas sino a datos económicos.
Este tipo de declaraciones públicas siguen generando ruido. Para los mercados, cualquier señal de intromisión política en la Reserva Federal es una alerta roja, ya que compromete la credibilidad de la política monetaria a largo plazo.
Como analizamos recientemente, este tipo de presión también está relacionada con los recortes de tasas que se anticipan en EE.UU. para 2025, en un contexto inflacionario cada vez más complejo.
Lo que esto significa para los inversionistas
En un entorno como el actual, donde las decisiones económicas están profundamente politizadas, los inversionistas deben mantenerse más atentos que nunca.
Algunos aprendizajes clave:
- No basta con analizar los fundamentales económicos. Hay que leer el contexto político y su impacto emocional en los mercados.
- El comportamiento del oro y del dólar puede cambiar abruptamente con un solo tuit o declaración.
- La confianza del mercado es tan volátil como las relaciones personales entre líderes clave.
Este episodio nos recuerda que incluso en economías maduras, las narrativas y percepciones pueden pesar tanto como los datos duros.
¿Qué otras sorpresas traerá esta relación en los próximos meses?
En InvertProfit, seguimos de cerca cada giro en la política monetaria y cada mensaje de la Casa Blanca. Porque en este nuevo orden financiero, los mercados ya no solo reaccionan a cifras: reaccionan a gestos, tensiones y titulares.
¿Quieres más análisis como este para anticiparte a los movimientos del oro, del dólar y de los mercados globales?
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